Las aislaciones del sistema constructivo son las encargadas de brindarnos el confort necesario para habitar un espacio. Es importante recordar que la aislación acústica y térmica está directamente relacionada a la eficiencia energética y a la sustentabilidad de la arquitectura.
El Steel Framing tiene la ventaja que se pueden incorporar fácilmente aislamientos en las cavidades de los paneles de paredes, entrepisos y cubiertas. Esto contrasta con las construcciones de tabiques de ladrillo o bloque, que tienen pobre aislamiento térmico y la inclusión de aislantes se dificulta y encarece.
En el mercado existen distintos tipos de aislaciones para el sistema constructivo Steel Framing. Usualmente los materiales empleados tienen propiedades de aislamiento acústico y térmico de manera simultánea.
Un material es capaz de brindar aislamiento térmico si es que actúa como barrera para la transmisión de calor. Esto significa que evita que las temperaturas al interior y al exterior se igualen. Por ejemplo, en una edificación en una zona cálida, el aislamiento tiene la función de evitar que la temperatura al interior se eleve. De manera análoga, en una edificación localizada en una zona fría, el aislamiento impedirá que la temperatura al interior baje hasta igualarse con la temperatura exterior. Esto permite mejorar la calidad de vida de los usuarios, cumplir con los estándares de habitabilidad y reducir el consumo energético. Por ejemplo, en la costa ecuatoriana, en una vivienda correctamente aislada, se pudiera ahorrar un 20% en consumo de electricidad por aire acondicionado.
El desempeño de los aislantes térmicos viene dado por la conductividad térmica del material y su espesor. En la industria de la construcción se emplea un número denominado valor R, que engloba la conductividad y espesor del material, e indica su desempeño como aislante, mientras más alto sea el valor R, mejor será el asilamiento provisto por el material. Por ejemplo, la lana de vidrio en espesor de 63 mm (2 ½”) tiene un valor R de 8, mientras que el espesor de 89 mm (3 ½”) tiene un valor R de 11.
En cuanto al desempeño acústico, existen varían maneras de caracterizar a los materiales y ensambles. Una de las más comunes es a través del STC (Sound Transmission Class) que indica el nivel de aislamiento que proporciona una configuración de pared determinada. Mientras más alto sea el STC mayor es el aislamiento acústico provisto. El STC, a más del aislante empleado en la cavidad, depende del tipo y espesor de revestimiento en ambas caras, el ancho de perfiles empleados y su modulación. Por ejemplo, una pared de bloque de hormigón, con 10 cm de espesor, tiene un STC de 39, y una de steel framing de 9 cm de espesor, con yeso a ambas caras y lana de vidrio al interior tiene un STC de 45.
Actualmente, existen en el mercado varias alternativas de materiales aislantes con diferentes prestaciones:
- Lana de vidrio: Es el aislamiento más común y económico. Se trata de filamentos de óxidos de silicio, aglomerados con polímeros. Tiene buenas prestaciones térmicas y acústicas. Es importante que no esté expuesto a la humedad porque sus atributos de aislamiento se degradan.
- Lana de roca: Se trata de fibras de rocas de basalto. Tienen un desempeño termo-acústico ligeramente superior a la lana de vidrio. Su ventaja es su elevada resistencia a los incendios.
- Poliestireno expandido XP: Es un material ligero con un buen desempeño termo-acústico. En la construcción seca se emplea como una de las capas del sistema EIFS.

Resistencias térmicas de diversos aislantes para un espesor de 10 cm.